Mira tú por dónde, resulta que va a haber una serie de piezas a resultas de la isla flotante que hice a primeros de año. Le he cogido gustillo al asunto.
Esta, al igual que la anterior, sale a partir de un trozo de olivo con una forma bien chula.
Para la vegetación, pues de todo un poco: planta preservada de confección casera, césped de Pablo el Marqués, musgo muy fino de Landscapes in Detail, matojillos de turf casero y algo de arenilla del monte.
El efecto oxidado del alambre que sujeta la pieza está hecho a base de pintura, arena muy fina y pigmentos.
La idea del montaje con el alambre retorcido y oxidado, debo agradecérsela al amigo Carlos de Custom Wargames, que siempre me saca del apuro cuando me encallo.
Las fotos de rigor:
¡Salud y buen pulso!